¿Sabías que el buscador de Google aminora la aparición de textos con faltas de ortografía en sus resultados? 
 
Internet llegó para ser un medio de comunicación masivo, inclusivo, democratizado y abierto. La gramática en medios digitales no solo es un mandatorio para los profesionales, también habla de quién eres, cuál es tu formación y qué tipo de conocimientos transmites a tus pacientes y clientes.
 
En una muestra de 200 profesionales de bienestar (no médico), hay datos que se contraponen a lo que tu audiencia espera de un texto profesional: 55% emplea de forma incorrecta las mayúsculas y minúsculas; 33% coloca de forma incorrecta los signos de interrogación y exclamación; 46% omite en algunas palabras los acentos; 57% emplea de forma inadecuada las abreviaturas de palabras; 65% no atiende correctamente las reglas de puntuación.
 
Algunas sugerencias para que tus textos en internet se atengan a las reglas gramaticales y proyecten una imagen realmente profesional de tu persona:

1. Verifica que tu corrector ortográfico esté bien configurado.
2. Al terminar tu texto, léelo y después de un momento vuelvelo a leer.
3. Al leer tu texto, adopta la postura de lector crítico y no de un redactor apasionado.
4. Usa los correctores de tus programas de texto, pero también usa un diccionario académico o especializado (el clásico tabique). No confíes completamente en los correctores digitales.
5. No escribas una palabra en la que tienes duda, sin antes consultar.
6. Cuando se trata de textos importantes para ti, pídele a un amigo o familiar que lo lea para obtener una aprobación externa.
7. Usa los diccionarios de sinónimos y antónimos para enriquecer tu texto y vocabulario.
8. En textos largos, cuida el ritmo de la lectura con comas y puntos.
9. Cuando uses el famoso copy paste, revisa que con cuidado el origen del texto y cómo queda plasmada la gramática en el texto destino.
10. Realiza planas (como en la primaria), de las palabras que te cuesta trabajo memorizar en cuanto a su ortografía.

Y quizá, la mayor de las recomendaciones: leer, leer y leer.
 
Todos tenemos descuidos, omisiones y confusiones a la hora de escribir un texto en internet. Es común; sin embargo, en nuestras manos recae la responsabilidad de evitar barbarismos y atropellos en la redacción y ortografía de un texto en internet.
 
Recuerda que un texto mal escrito sobre tu profesión, currículum, perfil de vida o artículo especializado, se verá afectado en credibilidad, certeza y convencimiento por parte de tu audiencia digital.

De persona a persona, Aliike Bienestar