El envejecimiento del organismo provoca que la actividad cognitiva se deteriore, evitarlo es imposible, pero retrasarlo es una alternativa que se logra con el ejercicio cardiovascular, cardiorrespiratorio, relaciones sociales saludables y meditación.

Los ejercicios cardiovasculares y cardiorrespiratorios se asocian con movimientos de flexibilidad e intensidad para quemar grasa o reducir medidas de ciertas partes del cuerpo, pero también ayudan a oxigenar la sangre que llega al cerebro, retrasando el proceso de deterioro de la materia gris donde se desarrollan los procesos mentales relacionados con la con la cognición y la inteligencia a través de las conexiones neuronales.

Otro método para fomentar e crecimiento del cerebro es la meditación, las personas que meditan tienen más volumen de neuronas en el hipocampo y en áreas como el tálamo y la corteza orbitofrontal, ligadas a la regulación de las emociones.

Por último, la amistad y las relaciones sociales son otro factor que ayudan al crecimiento del cerebro y por ende, a fortalecer las funciones cognitivas. En situaciones de aislamiento es importante evitar el contacto físico, pero los medios digitales y la tecnología te permiten mantener el contacto auditivo, visual y emocional. Con un amigo o amiga fomentas la conversación, desarrollas habilidades de empatía, intercambias ideas sombre lo que vives, piensa y te motiva. Estas conductas a las que no les prestas atención o no las haces conscientes con tus amigos, son un motor de funciones cognitivas que llevan al crecimiento del cerebro.

Ejercicio en casa, meditación, relación con amigos y un estado de bienestar en equilibrio , son la clave para hacer crecer tu cerebro, no para usar gorras más grandes, sí para fortalecer tus habilidades cognitivas y desarrollar tu poder creativo.