El Mindfulness es una extraordinaria técnica para vivir el presente en una posición atenta y receptiva a la energía universal. Tomar conciencia del momento que vives y estar en estado de paz, concentración y atención te permite enfrentar los retos de la vida con mayor responsabilidad, creatividad, productividad y soltura de mente y movimiento.

Practicar Mindfulness durante 30 días seguidos, quizá dos o tres veces por día, puede ayudarte a obtener los siguientes beneficios:

• Aumentar tu nivel entendimiento sobre situaciones nuevas o diferentes. Esto te ayuda a apreciar aquello que no conoces y abrir la mente a nuevas experiencias que enriquecen el sentido de la vida.
• Reforzar el sistema inmune. Parece algo increíble, pero la atención plena, además de aumentar tu estado de alerta y consciencia, también ayuda a fortalecer tus sentidos y sistema inmunológico, ya que un cuerpo atento es un cuerpo saludable y fortalecido, esto crea un halo de protección contra organismos patógenos.
• Fortalece los vínculos con tus seres queridos. El Mindfulness te coloca en una posición sensible a las emociones agradables: empatía, entendimiento, aceptación, amor. Te permite percibir y descubrir en cada persona su alto potencial como ser humano.
• Elimina estrés y ansiedad. El encuentro con uno mismo a través de la meditación y el estado de conciencia, te aleja de preocupaciones pasadas o inexistentes futuras. Especialmente cuando tienes que estar en casa y convivir con la familia por situaciones extraordinarias que pueden generar conflictos y desacuerdos.

El Mindfulness puede estar presente en cada una de tus actividades dentro de casa o en lugares de trabajo. Si aún no sientes tu estado de equilibrio y paz en total plenitud, puedes empezar por estos sencillos pasos:

Paso 1. Cuando te sientes en una situación de estrés o conflicto, realiza un pequeño alto, detente y observa. Hay momentos en la vida en donde la mejor decisión es no tomar una decisión, solo observar, ser consciente del medio que te rodea y esperar las respuestas de forma consciente y viva.

Paso 2. Da un paso atrás de ser necesario. Quizá estés acostumbrado a pensar que dar un paso atrás o recomponer algo es significado de derrota o equivocación. Un paso atrás significa un cambio de sentido, tomar un nuevo camino y reorientar la dirección. Por ello, un paso atrás es un acto de inteligencia y conciencia pura.

Paso 3. Vuelve siempre al aquí y ahora: Regresar al pasado en forma de culpa o recriminación es un acto sin sentido, el pasado puede ser nostalgia o aprendizaje, pero no realidad. Lo mismo sucede con el futuro, puedes proyectar situaciones de caos o enfermedad, incluso de muerte que generan más y más estrés. Los actos tienen sentido en el momento y no en el pasado o el futuro.

Paso 4. Respira profundamente. La acción de respirar va más allá de un acto automático, el significado biológico y funcional es limpiar, filtrar: inhalar energía y exhalar aquello que el cuerpo ya no requiere. Hay muchos ejercicios de respiración sencillos y fáciles de llevar a cabo.

Paso 5. Acepta nuevos pensamientos y emociones. Lo nuevo suscita dos posibilidades a elegir: la primera, miedo; la segunda, novedad. Elegir la segunda es el camino de la conciencia en donde todo es más amplio, perceptible y estimulante.

Busca en Aliike a los expertos maestros del Mindfulness, la experiencia es trasformadora.  

De persona a persona, Aliike bienestar.